Que la belleza que transmitáis a las generaciones del mañana provoque asombro en ellas.
Carta a los artistas, Juan Pablo II.

Haced cosas bellas pero, sobre todo, convertid vuestras vidas en lugares de belleza.
Encuentro con el mundo de la cultura, Lisboa, 12-5-2010, Benedicto XVI.

lunes, 20 de junio de 2011

Vivir en 2.0

Saludos desde el universo 2.0. Llevo tiempo sin escribir en este blog, pero no por ello he dejado de vivir en 2.0 (bueno, un poco sí, necesitaba “desconectar”). Quizás te preguntas: ¿de qué me hablas? Web 2.0, me suena pero ¿a qué te refieres cuando dices que vives en 2.0?

Desde hace algunos años el 2.0 ha ido invadiendo nuestro lenguaje en el campo de la tecnología. Pero 2.0 es (corríjanme los expertos) más una forma de hacer la red, de vivir la red, que una nueva tecnología (que también). En la web 2.0 el centro está en ti y en mí, en los usuarios finales: ¡en todos! Por eso me gusta vivir en 2.0, porque me permite hablarte y escucharte (¡imprescindible para aprender!), porque me permite… ¡interactuar en la red! Quizás es esto lo que el 2.0 ha traído a la red: ¡MÁS VIDA! Tú y yo ya no somos usuarios pasivos, sino que somos usuarios activos, ¡vivos! Para mí el cambio es importante, puesto que queda abierto un espacio para el diálogo en sus múltiples posibilidades: redes sociales, blogs, nuevas plataformas donde compartir nuestras creaciones (fotos, videos, presentaciones, escritos…), Wikipedia, nuevas posibilidades empresariales y en el campo de la salud, etc.

Hace algo más de un año que participo activamente en la red con este blog, con cuentas en facebook (personal y blog) y, las más recientes, en twitter (personal y blog) y también en linkedin. Hoy te quiero hablar de mi historia 2.0, qué he ganado, qué he aprendido, y quiero hacerlo porque ¡CREO EN INTERNET ;)!

Antes que nada, planteo una pregunta: “Internet, ¿ángel o demonio?” Imagino que tú estarás pensando lo mismo que voy a decir: depende del uso que se le dé, se puede usar para hacer mucho bien, para compartir desinteresadamente, para difundir lo que puedes ofrecer, para dialogar (Revaloria, Manos Unidas, Cesal, Wikipedia, etc.) pero también para lo contrario. El papel de internet es también fundamental –y en auge- para las empresas, universidades o cualquier institución. Creo que cada día es más cierta esta afirmación: “o estás en internet, o no estás”. Evidentemente, no quiero decir con ello que tu valor o el valor de tal o cual persona o institución sea mayor o menor por estar o no en la red, pero responde con sinceridad: cuando buscas una respuesta, un producto, un servicio, ¿dónde lo buscas? Mi primera respuesta es: en internet. Sí, en internet, si bien compaginando o contrastando mi búsqueda con mis amigos. Sin duda, es importante que cada persona haga un uso responsable de la red y, por tanto, que padres, educadores, jóvenes y adultos sepamos cuál es el valor de la red y hasta dónde llega…

Yo me quiero centrar hoy en lo positivo que me ha traído mi vida en 2.0 y quiero destacar un punto que me parece imprescindible en nuestro papel en la red: la autenticidad. Yo soy la misma persona (o lo procuro) aquí cuando estoy escribiendo una entrada en mi blog, o un tweet, o lo que sea, que cuando estoy en mi trabajo, con mis amigos, con mi familia. No puede haber una doble vida ni una vida paralela: mi “avatar” de internet y mi “verdadero yo”… No es una cuestión nueva, pues es algo que ha sucedido siempre: hay quien vive sin mostrar su verdadero rostro o quien vive “vidas paralelas”. Puede que internet facilite o dé nuevos cauces a estos hechos, no hay que ir demasiado lejos para darse cuenta: estafas, redes pederastas, falsas noticias, rumorología, etc.

Creo que para vivir una verdadera vida 2.0 debemos empezar por vivir una vida verdadera… Aquí entran discusiones sobre la edad, sobre los contenidos, sobre los derechos de autor y mil cosas más. ¿Quieres una verdadera vida 2.0? Defínete: ¿quién eres tú? Y actúa, escribe, dialoga, en consecuencia… ¡y con respeto!

A fecha de hoy y probablemente para siempre, tengo en mente esta pregunta: ¿quién soy yo? Tengo algunos datos concretos, otros que he ido narrando en algunas entradas de este blog, pero mantengo abierta siempre las preguntas: ¿quién soy yo? ¿Qué hago aquí? ¿Por qué y para qué tengo delante este portátil y esta conexión a internet? ¿Por qué tengo estos amigos? ¿De dónde me viene todo esto? ¿Qué aprendo? Son preguntas que de forma consciente unas veces y otras menos, he de responderme cada vez que actúo en mi día a día. Y como parte de mi acción, está mi participación en la web.

Por el deseo de compartir estas preguntas, de lanzarlas al mundo, de buscar respuestas… por el deseo de infinito –sí, ¡de infinito!- me abrí a la red: así comenzó mi blog, así un día abrí una cuenta en facebook (esto fue menos consciente, lo reconozco) y así he abierto recientemente (y conscientemente) mis cuentas de twitter. Así también, porque mi trabajo también forma parte importante de mi vida, abrí mi cuenta en linkedin. Por el mismo deseo me he puesto en contacto con algunas personas, por ese deseo he conocido nuevos amigos, por ese deseo más de una vez alguien conocido o desconocido me ha dado las gracias por cualquier entrada de este blog o por alguna frase concreta… Por ese deseo respondí al concurso “¿Cómo has descubierto a Dios?” del portal Catholic.net, tras haber leído su anuncio en Zenit.org, hasta ver mi testimonio publicado en un libro… Por ese deseo de enriquecerme en lo personal, de dejar caer las fronteras y las barreras que puede que nos separen en el tiempo, en la distancia o en la cultura, escribo hoy esta entrada…

Mi vida en 2.0 no es una “vida aparte” sino un aspecto de mi única vida, de la vida verdadera que procuro vivir cada día: una vida que si se reduce a la red se reduce muchísimo, pero si le quito la red te pierdo a ti. Me interesa preguntarte: ¿qué buscas en internet? ¿Qué haces en internet? ¿Qué vives en internet? ¿Qué te ayuda en internet? ¿Cómo es tu vida 2.0?

Hace unos meses una persona me dijo: "estoy descubriendo la verdad de la fe a través de tu autenticidad". El "mérito" no es mío, pero aprovecho la frase para lanzar esta petición: si tú también vives en 2.0, sé auténtico, sé tú mismo, con apertura y respeto: el mundo -y tú mismo- te lo agradecerá.

6 comentarios:

  1. Mientras leia esta entrada pensaba en los granizados de kiwi con manzana, y efectivamente, sin el 2.0 no se yo si los habrías probado, jejeje, tu me entiendes.
    Me gusta el enfoque de introducir autenticidad en la faceta más globalizada que tenemos, la tecnológica, porque solo así podremos darle de verdad el uso y el valor adecuado.
    [por cierto, en las preguntas te ha faltado incluir "¿y tu de quien eres hija que tienes tantos enchufes?"] y la respuesta, atencion al momento chispa del día, no es "Dos punto cero" sino "Dios y punto".

    Gran entrada Lydia !


    pd: Agradecer a tantos bloggers la generosidad de tiempo y esfuerzo en mantener un blog y llenarlo de buen contenido, a mi me encantaría pero reconozco que siempre me decanto por aportar parrafadas como estas comentando en los blogs que sigo... GRACIAS

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  2. Efectivamente, sin el 2.0 probablemente no hubiese descubierto esos granizados... y hubiese sido una gran pérdida, he de reconocerlo, ya me entiendes ;)! Jaja... A nuestra faceta tecnológica le puede faltar a veces esa autenticidad y sin ella perderíamos lo más importante de todo lo que como hombres hacemos: el 1 + infinito!! En mi caso es 0.000000000000000001 + infinito, pero procuro que no falte el segundo sumando!
    Cierto, ha faltado la pregunta que apuntas! Pasamos del 2.0 al D. :)
    Cuando empecé con el blog no sospechaba lo que iba a costarme mantenerlo medianamente vivo... Exige un esfuerzo, pero vale la pena! GRACIAS por tus parrafadas siempre gratas!
    Bs ;)

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  3. Muy bueno Lydia,sigue escribiendo,que no se cansen los dedos de teclear.Saludos!Ah,soy Ximo.

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  4. Gracias Ximo, los dedos y la cabeza a veces se cansan, pero sólo necesitan un periodo de reposo para reponerse y recuperar su actividad ;). ¡Nos vemos!

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  5. Oh yo también quiero probar esos granizados de Kiwi.Muy buena entrada. Lo prometido es deuda. Ayer no pude hoy sí. Es verdad Lydia internet es una nueva arma de Evangelización. El Papa lo recordaba hace unas semanas. Estamos en esta era en la que a través de internet podemos aer verdaderos apóstoles. Imagino que si San Pablo viviera en nuestro siglo utilizaría internet. Y si entonces recorrió muchísimos Km ahora con la era internet llegaría a todas partes no crees? Además con lo cabezota que parece ser que era llegaría a todas las naciones y todos los sitios. Me tienes que ayudar a hacerme un Blog. Imagino que sabes quien soy.

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  6. Anónimo, claro que sé quién eres, eres aquél a quien le debo una comida y a quien le debo, además, la ayuda para hacer un blog... y podría decir más cosas pero serían demasiados datos!! Dejarías de ser "anónimo" y no seré yo quien te saque de tu anonimato...
    El Papa está insistiendo mucho en el uso de internet para transmitir aquéllo en lo que creemos. Seguro que San Pablo, si viviese en este siglo, tendría como mínimo un blog y twitter!
    Pasa un buen fin de semana, mientras yo me voy al mejor pueblo del mundo :P!

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